Pasaje mínimo

La primera vez que pagué el pasaje de un autobús, tenía 12 años, había entrado a la secundaria y mi escuela no estaba tan cerca de casa como para ir y regresar caminando; recuerdo que en aquella ocasión pagué 2.50 pesos, costo que me pareció adecuado para los dos kilómetros que había de distancia entre mi casa y la escuela.

Esta mañana me levanté con la noticia de que el peaje había subido de 5.50 pesos a 7.00; los transportistas que circulan la zona, se han encargado de darle la mala noticia a la población con letreros fosforescentes pintados en los parabrisas de las combis. Esta acción poco favorable para la población, no está acompañada con la tabla de tarifas autorizada por el gobierno del Estado de México o la secretaría de transportes, lo cuál nos dice la premura en la alza de este servicio.

Yo vivo en Cd. Nezahualcóyotl, a casi dos kilómetros de la línea fronteriza entre el Estado de México y el DF, la gran mayoría de las personas que habitan en esta zona de la cuidad nos movemos al DF para ir a escuelas, trabajos y diversas actividades; casi todos empleados, gente que tiene un sueldo establecido,aumentado con el cálculo de la inflación a principio de año (que como todos sabemos siempre se sobrepasa).

El salario mínimo recibió este año un maravilloso aumento de 4.85%, con 57.46 pesos en la zona A, en cambio, este aumento afecta a millones de familias que ganan el mínimo haciéndoles pagar por viaje 1.50 pesos más que ayer.

No sé qué tipo de intereses estén moviendo este cambio de tarifas; hay quien dice que es un arreglo entre Enrique Peña Nieto y los transportistas, negociando el voto a favor del primero en las próximas elecciones federales.

Es verdaderamente indignante que el gobernador, designado por el pueblo, para defender los intereses del pueblo, no pueda defender la economía popular... tiempos de crisis... que parece que no terminarán.